La Mudanza

¡Tengo la camisa negra! Y no, no porque negra tenga el alma, pero porque traigo esa canción de moda. Esta mañana, desde la comodidad de mi alfombra disfruté del video. La verdad, no está tan bueno, pero la canción sí está interesante.

Lo que sí es que amanecí bien adolorido. Ayer fue la primera parte de... "La Mudanza" -- no, no es como "La Madrastra". Ay Dios, ya veo demasiado Univisión. Sólo me falta ser fan de Judith Grace. En fin, continuando con la corriente de pensamientos, ¿por qué la primera parte de la mudanza? La historia es simple y la narraré en enunciados de cuatro palabras.

Me voy a mudar. Departamento de dos recámaras. Mi roomate será Annelise. Pagar menos, vivir mejor. El nueve de Julio. Renta actual es mensual. Tendría que pagar Julio. Prefiero irme en Junio. Seré un homeless temporal. Mi departamento está vacío. Todo está con Nikita. El treinta digo adiós. Viviré temporalmente con Nikita. Me mudaré otra vez. Esta vez será definitiva. Al menos un año.

En fin, hubo mucha ayuda en la mudanza, lo que la hizo más fácil. Pero de cualquier manera, estoy bastante cansado. Sin embargo, aún falta limpiar y dejar todo impecable para que me devuelvan el depósito. Yo lucharé porque sea más del 75% de lo que pagué.

Por cierto, aquí les van dos aprendizajes de esta experiencia.

1. Entre más grandes sean las puertas de su hogar, más elegantes y acogedoras se verán. Como consecuencia, no tendrán que estar raspando las orillas del marco al empujar algún sillón en el flujo de muebles.
2. Con todo respeto al sagrado diccionario de la Real Academia Española: (hincado e implorando hacia el cielo) ¡Es mudarse, no moverse! -- lo siento, necesitaba hacerlo.