Thursday, January 20, 2005

La puerta en que me iré...

No, no es la barca. Es la puerta. La maldita puerta con la que me voy no lleva precisamente una cruz de olvido, debería de... al menos me serviría para atrancarla. Otra vez sucedió. Después de la nevada, no cierran las puertas del ché alemán.

Ahí tengo que andar maniobrando para manejar con el pavimento resbaladizo, sostener la puerta, el volante, meter los cambios y además, cambiarle al radio; JALOU, la música es importante. La pregunta sigue al aire... algo se congela, pero no logro saber qué y acelerar el proceso. Compré un anticongelante y se lo echo a las partes con algún mecanismo; pero no tengo la certeza de la raíz del problema. En fin, ojalá no nieve tan seguido.

2 comments:

Fer said...

oye, y tienes frio?????

psesito said...

Pues todo está acondicionado para no tener frío, y si tu trabajo no es al aire libre, pues... menos contacto con el clima al natural. En fin, he estado viendo correr a las personas en la nieve, y se ve bien chido. Debería de hacer lo mismo.