Vuelos

Esta canción siempre me ha ayudado en los momentos difíciles, y hoy, una vez más. Está conmigo.

no me pidas dejar mi vuelo hacia el sol
para estar contigo mi amor, que yo
tengo tanto que hacer tanto que alcanzar
mejor ven conmigo, ven a volar

y si a medio camino encuentras
que ha cambiado tu dirección

anda y vuela que aunque me veas derrumbar
al fin de todo siempre he de recordar
que me diste a su tiempo tu corazón
y seguiste tu vuelo, tu vuelo al sol

Patrones

Tengo que aceptar que me acabo de identificar con estas caricaturas. Me he dado cuenta que no estoy loco... o si lo estoy, no soy el único.

Random Number

Aunque en el pasado había visto una que otra caricatura referente al sition "xkcd"... ayer por primera vez visité el sitio y vaya que uno se identifica.

Sin duda... mi favorita de las que ví ayer por la noche:

Comparando Cumpleaños

En aproximadamente una semana... cumpliré 26 años. El golpe no ha sido tan fuerte como cuando cumplí 25, finalmente he empezado a asimilar que el tiempo pasa.

Sin embargo... este cumpleaños 26 será complicado. Las celebraciones de mi cumpleaños 24 y 25 fueron tan especiales y en momentos de mi vida cuando me sentía tan feliz... que en esta ocasión el panorama de comparación no es nada amigable.

Una semana después

La semana pasada ha sido una de las más estresantes de este último año. El trabajo consumió casi 70 horas de mis 5 días laborales. Sin embargo, tuve la posibilidad de meditar sobre mi vida presente y mi vida al futuro.

Mi vida continuó exactamente igual antes del domingo 21 que después del domingo 21. Ciertamente, el hecho de estar separados por más de 16 meses ha ayudado a que esta transición sea mucho más rápida de lo que pensaba. Tengo que aceptar que ha habido muchos momentos durante el día que me pongo a reflexionar sobre lo que pasó... pero no sé, hay como una barrera en mi corazón que simplemente no me deja torturarme sobre el "qué hubiera sido si...".

Lo acepto. Pensé que el domingo 21 algo iba a suceder y la solución estaría frente a nuestros ojos. Ingenuo fui. Nada pasó y eso me ayudó a finalmente entender que nada pasará. Punto final. No he llorado desde el lunes.

Una semana después, me siento como si una parte de mi estuviese ausente, pero eso no me impide ver hacia el frente y sonreir. No sé qué vaya a pasar en dos días, un mes, o el siguiente año. Lo que sé es que hoy me siente bien.

Peeep

M y yo creamos una clave secreta para avisarnos mutuamente que queríamos un beso. Así es, cuando ya sea él o yo, queríamos ser besados, simplemente hacíamos el sonido "peeeep", y el otro tenía que dejar cualquier cosa que estuviera haciendo para ir a darle un beso al otro.

Hoy, después de despedirme de él en el aeropuerto recibí un mensaje de texto "Peeep". Contesté "Kiss :*" y me partí en muchos pedacitos. Caminé por unos cuando segundos y me desplomé rumbo a mi auto. Pese a cualquier preparación que pensé tener, en el momento indicado... en efecto, ya no lloré en silencio, esta vez simplemente ya no pude sofocar los sollozos y me derrumbé al saber que ya se iba.

Aún en este momento. No creo que se haya ido. Yo aún creo firmemente ser parte de él y él ser parte de mí. En ocasiones me preocupa este delirio. Mi cabeza no puede aceptar la idea. Estoy escribiendo este mensaje y aún no puedo entenderlo. ¿Cómo pasó? ¿Por qué lo hice? ¿Por qué si lo adoro como no he adorado a nadie en mi vida?

¿Cómo poder cortar un amor que aún está palpitando?

Paso a paso

El día de hoy ya no lloré.

Igual y es la carga de trabajo y el hecho de que no tengo tanto tiempo libre para pensar. Esperé todo el día por algo que me pudiera hacer cambiar de opinión. La respuesta a mi llamada de ayer, la respuesta a mi último correo, o tal vez a mí mensaje de texto.

Nada pasó y acabo de aceptar que nada pasará.

Breathe Me

Help, I have done it again

I have been here many times before

Hurt myself again today

And the worst part is there's no one else to tell

Breathe Me. Sia.

Rutinaria se está volviendo mi tristeza. Todos los días al momento de encender mi carro, lo recuerdo. Me siento tan ingenuo. Sólo cierro los ojos y puedo sentir su sonrisa y escuchar sus sonidos. Aquí está conmigo, lo puedo oler. Me seduce nuevamente y quiero abrazarlo fuerte. No quiero soltarlo, no quiero que se me escape una vez más. Quiero poder sentirlo otro momento más, otro minuto más, sólo mientras termino de respirar. No te vayas, no te vayas... necesito que te quedes. Pero los brazos se me entumen y en mi presencia me dice adiós una vez más y yo le digo que es lo mejor, sé que es lo mejor, pero no sé cómo enfrentarlo. No quiero que sea la última vez pero yo le digo que lo será y que tenemos que ser fuertes. Quisiera poder al menos respirar su aroma, guardarlo secretamente en mi bolsillo... quedarme un segundo más con él, uno más. Me arrepiento al siguiente instante, puedo esperar... sé que puedo y que juntos podremos.

Se va.

Y así lo imagino irse, todos los días. Cada mañana y cada tarde desde hace varias semanas. Así, poco a poco, me despido cada día y me duele cada día más. No sé qué estoy haciedo. No sé porqué lo estoy haciendo. Sólo sé que estoy sufriendo, pero sé que las cosas van a estar mejor.

This is the reason for dreaming

Pulse is gone and racing –
All fits and starts

Window by window
You try and look into
This brave new you that you are

The Guilty Ones. Spring Awakening.

Plutón

Llevo casi 18 meses con un conflicto que no he podido resolver. ¿Cómo manejar una relación a distancia? Recuerdo que aquella noche de primavera del 2006 en que descubrí que eso era mi futuro a corto plazo, comencé a leer acerca de cómo sobrellevar una relación de ese tipo y cómo salir exitoso.

No soy una persona que se da por vencido fácilmente. Leí acerca de la comunicación y al leer sobre comunicación no sólo leía acerca de medios y frecuencia, sino sobre variedad y renovación constante. ¿Qué platicas a larga distancia eran las adecuadas? Leí sobre cómo continuar descubriendo a la persona a distancia y cómo seguir siendo partícipe de los nuevos intereses, problemas, o situaciones por las que el ser amado comienza a experimentar por su cuenta. ¿Cómo volver a juntar los caminos? -- esa era la pregunta.

Intenté seguir los consejos. Logré cortar la distancia. Logré disminuir el tiempo entre visita y visita, pero aún así... no logré lo suficiente. Hoy, gente me acusará de débil y de darme por vencido. Pero aunque me duela, una cosa es lo que el mundo diga y piense; y otra cosa lo que mi mundo experimenta.

Mi mundo sigue girando alrededor de él, mi sol. Mi órbita crece y crece de circunferencia con el paso del tiempo. La atracción sigue ahí y podría seguir girando continuamente sin descanso. En algunas ocasiones, estaré tan cerca que hasta podré sentir su calor; en otras, tan lejos que hasta olvidaré la razón por la que continúo mi camino. ¿Asteroides y cuerpos ajenos? Esos siempre estarán presentes, pero mi trayectoria está trazada. La atracción sigue ahí y seguirá. En ocasiones siento que el choque con un cuerpo externo simplemente me hará comprender que no es que mi trayectoria tenga que cambiar, sino que mi trayectoria siempre estuvo mal catalogada; nunca fui parte integral del todo.

La búsqueda externa

No sé porqué intento que el mundo entienda lo que pienso, lo que siento. ¿Aceptación? Supongo. Tengo que detenerme a pensar qué es lo que busco al buscar la opinión externa. ¿Una solución, consejo... o simplemente unos oidos? No sé. Lo único que sé es que no busco una etiqueta o un juicio. Eso lo encuentro donde sea.

Limosna

Hay varios recuerdos que tengo presentes sobre mi infancia. Uno de ellos es la actitud de mi madre hacia los extraños.

Mamá siempre ha sido una persona muy trabajadora y extremadamente sensible. Siempre está dispuesta ha ayudar a quien lo necesite. Sin embargo, no me dejaba de sorprender que cuando alguna pobre señora, señor o incluso niños tocaban a la puerta a pedir una limosna, mi mamá invariablemente les decía que no. **

"¿Qué no tienes corazón? ¿No te conmueven?" Recuerdo que la gente le preguntaba. Ella simplemente contestaba que sí tenía corazón, pero que ella no tenía dinero para ayudarles a todos y que la actitud de estas personas no era la adecuada. "Si me preguntaran... ¿le barro la calle?, ¿le limpio el carro? otra cosa fuera.", ella decía. Y era cierto, si alguien le ofrecía su trabajo mi mamá hasta de comer les hacía, además de darles dinero. Aún me sorprenden sus atenciones para tantas personas.

Fue así que mi madre me enseñó a no pedir limosna. Hoy me pregunto, ¿cuándo comencé a limosnear? No por dinero, sino por cariño.

El desconocido

No soy adepto a la poesía y en ocasiones la evito. No obstante, uno no puede cegarse a su belleza. Aquí les va un fragmento de "El desconocido", un poema de Octavio Paz que recordé esta noche.

La noche nace en espejos de luto.
Sombríos ramos húmedos ciñen su pecho y su cintura,
su cuerpo azul, infinito y tangible.
No la puebla el silencio: rumores silenciosos,
peces fantasmas, se deslizan, fosforecen, huyen.
La noche es verde, vasta y silenciosa.
La noche es morada y azul.
Es de fuego y es de agua.
La noche es de mármol negro y de humo.
En sus hombros nace un río que se curva,
una silenciosa cascada de plumas negras.

Debilidad

Tengo debilidad por las miradas intensas y las sonrisas misteriosas.

Sudadera

Hace varios años compré una sudadera en Princeton. La verdad, fue dinero bien invertido ya que utilizo esta prenda de vestir muy seguido, y ahora más viviendo en Seattle. Mientras viví en DC nunca nadie me preguntó si yo había ido a Princeton; era simplemente parte del atuendo. Pero por estos rumbos, es la pregunta de cada tercer día. La verdad, la verdad -- ya me cansé de decir que no. Así que tengo varias opciones:

1) Hacer una maestría en Princeton para poder decir que sí
2) Que me valga decir que no y no dar explicaciones
3) Que me valga decir que no y encontrar una respuesta de 3 palabras con las que me sienta agusto: algo así como decir... "Sólo en espíritu"
4) Comprarme otra sudadera

La solución más razonable es la número uno, pero no me agrada demasiado ninguna de las maestrías que se ofrecen y no están a distancia. En fin.

Decisiones

Hace varios años escuché a una amiga mía decir que el amor no era un sentimiento, sino una actitud. ¿Una actitud? Las mariposas en el estómago no son una actitud. Las ganas de ver a la persona amada no son actitud. Ese constante ir y venir de pensamientos y planes a futuro no son una actitud. El que me derrita al instante al escuchar su voz o al verlo llegar al aeropuerto, eso es algo más que una decisión consciente... o tal vez no.

¿Es una decisión el estar enamorado?

Pausa

Hay días en los que por un par de segundos el tiempo se detiene. No sé si les ha pasado, pero hasta tu respiración se paraliza y entras en una especie de esfera invisible. Sabes que estás dentro, pero no puedes identificar cómo. Sólo lo sabes.

El momento es tan pequeñito que no hay manera de contemplar o describir tu alrededor, sólo miras hacia al frente, continúas lo que estabas haciendo, pero hay algo diferente. Ahí, detenido en tu espacio temporal es cuando recuerdas que la vida es muy corta. El momento se termina, y la esfera invisible de la que eras parte se esfuma. El tiempo sigue su curso, y tú también.

Seis Meses

Hoy será mi aniversario de seis meses en mi nuevo trabajo. Aún me siento como "el nuevo", aún siento que tengo tanto que aprender... creo que cuando lo deje de sentir, será el momento de buscar nuevas oportunidades.

Chispitas

Creo que fue esa mañana de principios de Septiembre. Sólo recuerdo estar sentado en el piso, leyendo y llorando. No puedo recordar el preciso instante; tal vez fue ese momento cuando la lámpara iluminaba la oración "Why didn't I write the email you just wrote?"... sí, fue en ese instante que como chispitas en la hoguera, mi corazón comenzó a incendiarse.

Aún no entiendo cuál fue el proceso, sólo pude sentir las reacciones. Sólo sentí algo que comenzó a arder desde dentro. Por tanto tiempo, ese algo me dio el calor que tanto me hacía falta, ahora me quemaba sin protección alguna. No pude apagar el incendio, me lastimaba el sólo intentarlo. Tan inexperto actuaba, que al tratar de apagar el fuego, sólo lo hacía más grande y más doloroso.

Dicen que el tiempo lo cura todo. Posiblemente sea cierto, pero no todos somos aves fénix para resucitar de las cenizas.

Melting Pot

Again Desdemona hesitated. She thought about her children. She imagined coming home to them without any food. And then she swallowed hard. "Everybody mixed. Turks, Greeks, same same."

Eugenides, Jefrey. Middlesex